viernes, 12 de abril de 2013

Capitulo 467: Escrache.





Hoy vamos a explicar lo que significa esta palabra y pondremos un buen artículo que me mandó mi buen amigo Ángel. Fiel seguidor de este blog.
Espero que os guste y entendáis lo que significa esto y sepamos todos, las prisas que se han dado en tomar medidas contra ello. ¿Tienen miedo?

El ‘escrache’ surge en Argentina durante los años más duros de la dictadura, aunque cobra carta de naturaleza a mediados de la década de los 90. Consistía en la protesta pacífica frente a las casas de exaltos cargos del régimen militar a los que el pueblo consideraba responsables de los abusos y las desapariciones de miles de ciudadanos y que habían sido indultados a partir de 1995 por el gobierno de Carlos Menem. Fue muy frecuente en la capital, Buenos Aires. Pero su eclosión, y su degeneración, se produjo en los tiempos del célebre ‘corralito’  en 2001. Las juventudes peronistas, la temida ‘ Campora’,  lo utilizó contra el presidente Fernando de la Rúa  -al que llamaban "Fernando de la duda"-  y contra miembros de su Gobierno, a quienes se consideraba responsables de la ruinosa situación económica del país. Pasó en aquellos días de ser una protesta pacífica, e incluso festiva, a convertirse en acoso e intimidación. Hoy, por cierto, algunos de los líderes de aquellas temidas juventudes, de corte filofascista, como el viceministro de Economía del país, Axel Kicillof o el hijo de la presidenta, Máximo Kirchner, lo han sufrido en sus carnes. La historia una vez más repetida, años después, como farsa. Kicillof era abucheado hace algunos meses mientras regresaba en barco a su país acompañado por su mujer y sus hijos. La propia presidenta, Cristina Fernández de Kirchner sufre cada vez más frecuentes caceroladas en las calles de Buenos Aires por una población harta ya de sus políticas. Aquí en España, más de una década después, la autodenominada Plataforma de Afectados por la Hipoteca ( PAH ) la ha importado directamente de Argentina a nuestras calles.




ESCRACHE

Javier Gallego - Eldiario.es


Nos habéis perseguido a todos. Primero fuisteis a por los jubilados

pero como vosotros tenéis la jubilación asegurada, no os importo

hacerles daño. Después fuisteis a por los enfermos, los

discapacitados, los dependientes y como vosotros no tenéis problemas

de dinero, no os importo cargar a las familias con un peso que no

pueden soportar. Entonces fuisteis a por los funcionarios, los

médicos, los profesores. Fuisteis a por nuestra sanidad y a por

nuestros colegios porque vosotros tenéis los vuestros asegurados.

Protestamos y no os importó enviarnos a los antidisturbios a que nos

hicieran daño.



No os importó que hubiera millones de parados y fuisteis también a por

ellos. Les quitasteis un pedazo de lo poco que les queda y les

gritasteis que se jodan en mitad del Parlamento. Y empezasteis a

jodernos a todos los demás, a la cultura, a los mineros, a todos los

contribuyentes. Fuisteis a por todos nosotros y no os importó hacernos

daño para no hacérselo a los vuestros. Los bancos vinieron a por

nosotros y vosotros nos quitasteis los cuatro cuartos que nos habían

dejado en los bolsillos. Ellos nos robaban, vosotros hacíais negocio

con nuestro dinero. Volvimos a protestar y nos disteis la espalda de

nuevo.



No queríais ver cómo la gente saltaba por las ventanas o se colgaba

del cuello. Los bancos que nos habían puesto la soga iban a por los

que menos tenían y les dejasteis hacer. Dejasteis que se aprovecharan

con las preferentes de los más indefensos y vulnerables y jamás

perseguisteis a los timadores. Dejasteis que algunos se quitaran la

vida angustiados por su desahucio. Les empujasteis al vacío sin mover

un solo dedo y permitisteis que pelotones de policía siguieran sacando

a la gente de sus casas a empujones. Podríais haberlo evitado pero

seguíais mirando para otro lado.



Los jueces españoles y el tribunal europeo han decretado que las

hipotecas españolas son ilegales y abusivas y a ninguno de los dos les

habéis hecho caso. Miles de personas en la calle y un millón y medio

con su firma, os han pedido parar esta sangría y habéis tratado de

escaparos de ellos. Nos disteis unas medidas insuficientes que no

sirvieron para nada y ahora nos volvéis a ofrecer un simulacro de

solución en diferido. Os pedimos pan y nos dais migajas. Os pedimos

ayuda y nos dais antidisturbios. Os pedimos que nos echéis una mano y

nos la echáis al cuello.



Ahora van a por vosotros y reclamáis que os amparemos pero ya no queda

casi nadie de nosotros que lamente lo que os está pasando. Os toca

sentir lo que sienten los perseguidos. Ahora nos pedís la justicia que

vosotros nos habéis negado. Invocáis la democracia que habéis

destruido y el respeto que no nos tenéis. Exigís que se respeten los

derechos que no habéis respetado. Llamáis terroristas a los que os

persiguen como si no supiéramos que sois vosotros los que los habéis

aterrorizado. Nos llamáis golpistas mientras nos moléis a golpes. Hay

que ser muy miserable para llamar acosador al acosado.



Seguid así. Seguid dando la espalda a la realidad, seguid llamándonos

criminales en lugar de ciudadanos. Seguid aumentando la pobreza, la

desigualdad y el paro. Seguid dejando que a la gente la estafen, la

echen a la calle y los ladrones anden sueltos. Seguid haciendo un

escrache masivo a la población y acabaréis sufriendo un escrache

masivo y violento. No es una amenaza, es una advertencia de lo que,

desgraciadamente, podría pasar.



Ahora solo van a por vosotros pero mañana irán a por vuestra

seguridad, la seguridad que les habéis negado, y a por vuestros

privilegios, a por el dinero que les habéis quitado, los coches en los

que huis de nosotros, las casas que tenéis y que ellos han perdido, el

bienestar que les habéis arrebatado. Querrán infligiros el mismo dolor

que le habéis causado. Y a nadie le importará si os hacen daño porque

el daño que habréis hecho nos habrá anestesiado a todos. Serán tan

violentos como lo habéis sido vosotros. Se saltarán tantas leyes como

vosotros habéis violado. Serán peligrosos porque están desesperados. Y

serán incontrolables porque no tendrán nada que perder.



Vosotros se lo estáis quitando todo. Vosotros sois los responsables de

lo que os pase. Os lo merecéis. Vosotros no sois las víctimas, sois

los culpables, sois la causa de los escraches que estáis padeciendo.

Vosotros sois el escrache de este país. Le habéis hecho un escrache a

esta democracia hasta obligarla a huir por patas. Nos habéis hecho

escraches cada vez que nos reuníamos en las plazas y en las calles. Le

habéis hecho decenas, cientos de  escraches a los ciudadanos a golpe

de porra, recorte, insulto y decretazo.



Sois vosotros los que permitís el acoso a los ciudadanos de una banca

miserable que impone una ley injusta. Sois vosotros los que dejáis que

miles de familias sean humilladas delante de sus vecinos, que sus

casas sean señaladas con una cruz de "desahuciado" en la puerta, que

queden marcados como parias y excluidos, que ancianos, niños, enfermos

y gente sin recursos estén sufriendo la derrota, la violencia policial

y la vergüenza pública. Sois vosotros los que lleváis más de cuatro

años haciéndonos un escrache tras otro, los que lleváis años huyendo

de los que ahora os persiguen, los que estáis empujando a miles de

personas por un barranco por el que os acabarán arrastrando, los que

estáis provocando una pobreza, un odio y una desesperación que pueden

acabar estallando.

Si dejáis que eso ocurra, recordaréis el último verso del poema de

Niemöller: “Cuando vinieron a buscarme, no había nadie más que pudiera

protestar”. Nadie protestará porque os estaremos persiguiendo todos.

1 comentario:

  1. Un honor que me catalogues como amigo sin habernos conocido aún personalmente. Yo, así lo voy sintiendo también.
    Gracias por publicarlo en tu blog, porque creo que así llegará a más gente, e ir poco a poco creando conciencia por si algún día entre todos, somos capaces de cambiar algo de lo que no hace tanto era un buen país y hoy no es más que una "puta cueva de ladrones".

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