Capitulo 77: Carne de cañòn.

Salía de casa como cada tarde en busca del camino que le llevara al asilo, allí  cenaba y se acostaba todos los días, su ceguera casi total no le dejaba hacer vida normal, aunque el se resistiera a ello. Nunca se quiso operar de aquellas cataratas que tenia, aunque le aseguraron que podía quedar bastante mejor de la vista de lo que estaba ahora, siempre fue un poco terco, bueno, un poco no, muy terco.

Al morir su mujer hace varios años, su vida cambio por completo, un hombre que nunca había pisado la cocina, nunca había ayudado a su mujer en las tareas del hogar y de golpe y porrazo se queda solo, completamente solo, por que nunca tuvieron hijos, ahora sus dos sobrinas vienen de vez en cuando a visitarle, aunque la visita dura bien poco, ante un hombre tan terco no hay quien pueda hacer nada.

Ellas saben que ve muy poco, solo hace falta entrar en su casa y ver como esta todo, poca limpieza y no por que el no la haga, si no por que no ve donde esta la suciedad, es triste, pero es así; hace dos meses vinieron para convencerle de que se fuera al asilo del pueblo, allí con las monjas y con las que trabajan allí, estaría mucho mejor que solo en casa, el se puso histérico cuando se lo dijeron, casi le da un infarto al oír aquella noticia que sus sobrinas le estaban dando de buena fe, puesto que ellas trabajaban las dos y no se podían hacer cargo de el.
El día siguiente se le paso entero llorando, el tener que abandonar su casa en la que había vivido toda su vida y que había levantado el solo desde el primer ladrillo, le suponía un trauma muy grande, pero tenia algo mejor que aquella propuesta que le habían hecho sus sobrinas ??

Hicieron las maletas entre las dos y las montaron en el coche, vamos Tío, que nos vamos, le dijeron.
El llorando se monto en el coche, parecía un niño de 4 años en lugar de un hombre de 75, solo le faltaba decir!!No quiero ir!! y ponerse a dar patadas.

Llegaron al asilo y fue muy duro para el los primeros días, aunque conocía a gente de su pueblo no intentaba nunca integrarse con ellas, en el pueblo siempre fue muy "descastao", pocas conversaciones tuvo con sus vecinos toda la vida, su mujer era de otra manera, mucho mas simpática y agradable, siempre decían las vecinas !que vería esta mujer en este "jamelgo"!!!!

No ha llegado a un mes desde que esta allí en el asilo de mayores y ya se ha venido a su casa, no soporta el estar allí metido y que le pongan horas para todo, para acostarse, para levantarse, para comer, para merendar y para cenar, lavarse todos los días, eso para la gente de cierta edad es difícil de asimilar.

Todos los días por la mañana temprano me le encuentro andando por mitad de la calle, viene del asilo de acostarse, eso ha sido el ultimo trato que ha hecho con sus sobrinas, cenar y dormir allí, el no quería pero el otro día se cayó en casa y esta algo mas torpe, tiene dolorida la rodilla y no se maneja muy bien solo; todos los días al cruzarme con el lo pienso, este hombre morirá en la carretera, atropellado por algún coche o moto, ojala y me confunda, pero es "carne de cañón".