Capitulo 69: El monaguillo infeliz.

En primer lugar decir que la siguiente historia es ficticia, cualquier parecido es simple coincidencia, también si eres menor de edad no sigas leyendo, o mejor no, sigue leyendo, lo mismo te sirve de algo.



Nunca se supo explicar el por que, tampoco si seria el único al que le pasó, que seguro que no, como no se lo contó a nadie ?? se vuelve a preguntar hoy, cada vez que se acuerda.

No recuerda muy bien como empezó, ni cual fue el primer día que le pasò, lo que si recuerda es que desde el primer momento le cayó en gracia al señor cura, se dio cuenta por que a la hora de la misa, siempre le tocaba ser el monaguillo de la derecha, que era el que mas trabajaba, el de la izquierda, solo ponía la "bandeja" debajo de la boca de la gente que iba a comulgar, por aquellos años las "ostias" las daba el cura directamente a la boca, nada de poner las manos para cogerlas como se hace ahora, luego al acabar de dar la Comunión, cogìa la bandeja, la limpiaba con la servilleta y lo vertía en el Cáliz, no se que iba haber en la bandeja, como no fuera alguna "baba" de algún feligrés, nunca entendí el "sacudiero" de bandeja, que migajas podían salir de las "ostias"??

Aquel día después de Misa el Sacerdote le dijo que se quedara que le tenia que explicar algo para la Misa de por la tarde, el saliò de la Sacristía y les dijo a sus amigos que se fueran, que el tardaría un rato, luego os busco para jugar......

El Cura se le acerco y le dijo que se probara un traje nuevo de monaguillo para ver si le estaba bueno o había que arreglarle los bajos, iban a ser los Oficios en pocos días y tenían que estar los trajes mas limpios y nuevos que nunca, el asintió con la cabeza y le hizo caso, cogiò el traje y se encaminó a ponérsele cuando el "Padre" le dijo que no, que mejor se quitara la ropa para coger mejor las medidas, el se quedó extrañado, siempre se ponían los trajes encima de la ropa que llevaban, pero aquel día por lo visto no era así.
Se quito las calzonas y la camiseta que llevaba y se puso el traje encima, el Cura se agachó para ver si le arrastraba y se dio cuenta que le estaba un poco largo, le dobló un poco la parte de abajo del traje y luego se levantó, bueno, yo creo que esto está, espera que te ayudo a quitártelo le dijo, no déjelo Padre, yo soy capaz solo; El Cura le quito el traje y se le quedo mirando al chaval al verlo en calzoncillos, el se dio cuenta de que el Cura le estaba mirando con una cara un poco rara, así que se apresuró a coger las calzonas y ponérselas, pero antes de que se pusiera la camiseta, el Sacerdote le acaricio el cuerpo.
_¿Que hace Padre ? le dijo dando un respingo hacia atrás
_Calla hijo, te tengo que absolver de tus pecados y para eso te tengo que sacar al demonio del cuerpo.
_Que demonio, si yo no tengo pecados !!!
_No digas que no, que todos tenemos pecados, yo el primero.
Le volvió a acariciar y el pobre muchacho ya no sabia lo que hacer, si creerle al Cura o salir corriendo, pero como salía corriendo de allí, a quien le podía contar eso y que le creyeran ??
Optó por estarse quieto aunque recuerda que estaba temblando de miedo, se le hizo eterno aquel momento, menos mal que sonó pegar en la puerta de fuera, èl, al escuchar llamar, dejò de tocarle y salió rápidamente a ver quien era.

_Tía Juana !!! que desea ?? le preguntó el Cura
_Venia a encargar una misa para el sábado.
_Claro, pase para adentro.
En ese momento nuestro monaguillo salio de la Sacristía y tía Juana le saludo, Al mismo tiempo el Padre le dijo que si ya había acabado de probarse el traje.
_Si, ya le he doblado y puesto en su sitio, le dijo.
_Vale, pues mañana te vienes a Misa de ocho.
_No se si podré Padre, le dijo el chaval que estaba acojonado por lo que le había pasado.
_Como no vas a poder?, le dijo tía Juana, si tu madre está deseando de que vengas de monaguillo!!

Joder, Tía Juana le estaba fastidiando su excusa, ya no sabia lo que iba a decir para no ir, así que agachó la cabeza y se despidió de ellos, Vale, mañana nos vemos Padre.
_Que buen muchacho es, le dijo Tía Juana al Cura.
_Si, la verdad que estoy muy contento con el, es el mejor monaguillo que tengo.

Por el camino se iba secando las lagrimas, no quería que nadie le viera llorar, no podía dar explicaciones a nadie de lo que le acababa de pasar, entre otras cosas por que nadie le creería, tenia ganas de vomitar y estaba sudando igual que un pollo.
Casi llegando a la Plaza vio a sus amigos que estaban jugando a "rescate", ¿juegas? le preguntó su mejor amigo.
_No, no tengo ganas.
_Por que, si es el juego que mas te gusta ??
_Lo se, pero hoy no tengo ganas.
_Bueno, tu te lo pierdes.
_Me voy a casa.
_Ya ?? tan temprano??
_Si, creo que estoy enfermo.
_La verdad que tienes mala cara, estas blanco, le dijo su amigo.

Si tu supieras lo que me ha pasado, pensó para sus adentros, no, no se lo podía decir, quien le iba a creer??

_Me voy.
_Mañana te llamo para ir a Misa, le dijo su amigo.

El, al escuchar la palabra Misa, no se pudo aguantar las ganas de vomitar y aunque se puso las manos delante, no evito que saliera de su cuerpo toda la comida que tenia dentro de el.
Su amigo al darse cuenta se ofreció voluntario para llevarle a casa y aunque el se negó al principio, se dio cuenta de que se mareaba por momentos, así que aceptó ir agarrado al hombro de su amigo.

Al llegar a casa su madre le vio con mala cara, se asustó al pronto:
_Que te pasa Hijo?
_Nada, estoy mareado y he vomitado.
_Déjame que te toque, uy, estas muy caliente.
_Que no Mama, que ya estoy mejor.
_Voy a llamar al médico ahora mismo
_Que no, que no hace falta de verdad, que estoy mejor.

La madre dudó que hacer, al final le tumbó en el sofá y le puso el termómetro.
_Como tengas fiebre le llamo.
_Vale.
_Bueno, yo me voy, dijo su amigo saliendo ya por la puerta.
_Vale, muchas gracias por acompañar a mi hijo.
_No hay de que, señora.

Que has estado haciendo para venir así de mareado, no has estado en Misa ? le pregunto su madre.
_Claro que si, justo al acabar de contestarla, le vinieron otra vez los vómitos.
_Espérate!!! le dijo su madre.
ya tenia el estomago vacío del todo, así que solo eran "arcadas" lo que le daban.

Se te tiene que haber cortado la digestión, le dijo su madre....................




Hoy en su Pueblo, han puesto el nombre de una calle al señor Cura aquel, han estado todas las autoridades presentes y familiares del Cura ya muerto hace un par de años, él también ha estado, por dentro le asaltaban las ganas de liarse a gritos delante de todo el mundo que había allí, decir todo lo alto que pudiera que ese hombre había abusado de el y de muchos mas niños de su edad seguramente, pero otra vez no se ha atrevido, le puede la vergüenza.

Esta madrugada se levantó, era lo único que se le había ocurrido hacer, ha salido andando camino de la calle nueva inaugurada, con un bote de pintura y un pincel debajo del brazo y unas escaleras de tres peldaños, con eso le bastaba; justo debajo del nombre del Cura y su fecha de nacimiento y muerte ha escrito la palabra "PEDERASTRA", según ha acabado de pintarlo se ha quedado mirando un rato su obra maestra como diciendo, ahora si, ya me he confesado y aunque sabe que lo limpiaran pronto, seguramente alguien de los que lean el escrito, estarán de acuerdo con el.