Sintió como la entrepierna se le mojaba, se estaba meando de miedo....
_Cabrón!!!! Ahora te vas a mear en el coche!!! le dijeron a la vez que le metían otro puñetazo.
_Vale, ya me acuerdo de la contraseña.....
Fueron a tres cajeros, en todos ellos sacaron dinero, no poseía mucho en las cartillas, casi siempre lo tenia en casa, el esperaba que no se acordaran de ir a ella a por mas dinero, no soportaría que le hicieran daño a su mujer y mucho menos a sus hijos.
Mientras tanto los dos obreros de su taller, empezaban a preocuparse por su jefe, el nunca se retrasaba y si por cualquier motivo lo hacia, siempre les llamaba. Uno de ellos volvió a llamarle al móvil, pero a pesar de dar la llamada, nadie le Cogía, !!Que raro!! Le dijo al compañero.
Fue un cliente el que les dijo que la furgoneta estaba detrás del bar del polígono, ellos enseguida fueron a comprobar si era la furgoneta y a preguntar al del bar si había estado allí.
Al contestarles el camarero que allí no había estado les empezó a entrar preocupación por su jefe y mas aun, al ver la furgoneta con la guantera abierta y revuelta; también vieron el móvil debajo del sillón y ya sospecharon que algo raro ocurría.
Mientras tanto los ladrones ya habían limpiado todo el dinero de su cuenta, entre un cajero y otro, habían pasado unas dos horas y media desde que le asaltaran, el esperaba que le echaran de menos en su taller y le buscaran, aunque lo único que quería era que le soltaran y no le hicieran ir a su casa.
_¿Esto es todo lo que tienes ?? Le preguntaron.
_Si, acabo de abrir el negocio y no me va muy bien, les contestó.
_Serás mentiroso!!!! Sintió otro puñetazo en su estomago, empezó a toser del dolor, creía que le habían reventado por dentro.
_Déjalo ya!!! le ordenó el conductor, ahora te vamos a llevar a un sitio muy bonito.
Se asustó de nuevo y no pudo aguantarse las ganas de preguntar.
_Donde me vais a llevar??
_Ahora lo veras.
Le taparon la cabeza con un saco y emprendieron la marcha con el coche, no sabe cuanto tardaron más o menos, pero alrededor de 20 minutos o así, estuvieron conduciendo.
_Venga, ya hemos llegado, bájate!! Le ordenaron.
Le costó un mundo bajarse del coche, la paliza que le habían dado había hecho efecto y estaba completamente sin fuerzas.
_Ponte de rodillas!!! le mandaron.
A el se le vino otra vez el mundo encima, ahora si que no me libro de que me maten, pensó mientras empezaba a rezar.
_El conductor del coche le ordenó a los otros dos compañeros de secuestro, venga, remátalo que nos vamos!!
El, cerro los ojos y apretó los dientes, estaba esperando el tiro en la cabeza cuando de pronto le quitaron el saco que le habían puesto, la claridad le deslumbró; sintió una patada en el estomago y otra al mismo tiempo en la espalda, ya no le dolía nada, no sentía los golpes que le estaban dando, la verdad que prefería eso a que le pegaran un tiro. Cuando se cansaron de sacudirle le dejaron allí tirado, el no pudo conocer el sitio al que le habían llevado antes de que le molieran a palos.
Se despertó en una cama de hospital, estaba lleno de cables y tubos, se miro los brazos y los vio lleno de cardenales, miró de reojo a su alrededor y vio a su mujer allí sentada, ella al ver que el se había despertado le sonrió y una lágrima cayó por su mejilla.
joder k fuerte
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