domingo, 24 de febrero de 2013

Capitulo 440: Ruta en Zarza de Montanchez.




Como por arte de magia o como si en algún lugar del firmamento estuviera escrito, hoy nos pasó una cosa extrañísima.

Después de tener preparada y descargada una bonita ruta por el entorno del pueblo de Almoharin, montarnos en los coches y llegarnos hasta el lugar donde comenzaba dicha ruta, hemos escuchado bastante alboroto que había en el pueblo. Nos ha extrañado que a horas tan tempranas hubiera tanta gente junta. Al principio hemos pensado en que podían ser cazadores, puesto que en muchos pueblos hoy se daban batidas para el desecaste de zorras y tal.

El caso que todo ha sido por querer hacernos una foto en el lugar de partida, justo en la bonita plaza de Almoharin. Buscando los soportales de su iglesia hemos encontrado a gente con palos y mochilas, como si fueran a hacer lo mismo que nosotros, es decir, andar.

Acercándonos hasta donde estaba la mayoría, les hemos preguntado si se disponían a realizar alguna ruta senderista, por si era la misma que la que teníamos pensado hacer nosotros. Muy amablemente nos han estado explicando cual era la ruta que teníamos descargada y los peligros que podía haber hoy al realizarla. Dichos peligros eran los cazadores que anteriormente he comentado (como casi siempre). El caso que la presidenta del grupo de senderismo de Almoharin, Paqui, nos ha invitado a ir con ellos hasta la localidad de Zarza de Montánchez, donde ellos comenzaban la ruta de hoy.


Allí les esperaban varios miembros de su grupo de origen Zarzeño. Los cuales habían preparado la ruta de hoy por su pueblo. Hay que decir que el grupo de senderismo de Almoharin, llamado “Almojarin”, tiene más de un ciento de integrantes, de todos los pueblos de alrededor, por lo que tienen un punto a su favor a la hora de organizar distintas rutas. Puesto que los mismos integrantes del grupo, pueden hacer de guías de todos los demás.

No han tardado mucho en convencernos a los nueve integrantes de nuestro grupo, que hoy nos habíamos juntado para andar. Y después de consensuarlo entre nosotros, hemos decidido hacer su ruta y así disfrutar de una experiencia nueva para nosotros, puesto que nunca antes, en casi nuestro año de existencia, habíamos salido a andar con tanta gente a la vez.

Montándonos de nuevo en los coches hemos partido hasta Zarza, donde en una cochera nos esperaban los citados integrantes del grupo, con una mesa llena de roscas y demás dulces, con su café o chocolate, como la gente prefiriera de tomar.




Nuestro grupo rápidamente integrado en el tema, ha aprovechado para tomarse su café y dulce correspondiente, (si no lo hacías se enfadaban con nosotros, jejeje), así que amablemente hemos degustado dichos dulces, los cuales estaban deliciosos.

Una vez que todos los integrantes de la ruta estábamos en el lugar de partida, hemos comenzado dicha ruta, bajo un gran manto blanco debido a la gran helada caída en el día de hoy. Andar tanta gente a la vez y muchos de ellos desconocidos, (para nosotros casi todos) es muy gratificante, puesto que en el camino te da para ir conociendo poco a poco a muchos de los senderistas. Hablar de las costumbres suyas, saber lo que se come por allí del campo, que hay que decir, que varía poco de nuestras comidas y costumbres. También comentamos nuestras últimas rutas, para ver si habíamos compaginado a la hora de hacer alguna y cuando así ha sido, hemos opinado sobre ellas. La verdad que todos decimos lo mismo siempre, que hay mucho abandono en la mayoría de rutas y que con muy poco dinero que se invirtiera, podíamos tener muchas más rutas marcadas y preparadas de las que existen. Ellos quieren marcar una que discurre por su localidad, y que tiene el nombre de la “Ruta del garbanzo”. Se debe su nombre a que una vez acabada se ofrece a los senderistas una “garbanzada” en su plaza mayor. A la cual como podéis imaginar estamos invitados desde hoy. Lo más probable como decía una canción del grupo “mecano”, “La fuerza del destino, nos hizo repetir…” Pues eso, que nos haga repetir a nosotros experiencia.




 Es fácil que la incluyamos en nuestro calendario ficticio, puesto que nosotros vamos sobre la marcha domingo a domingo. Que visto el resultado no nos va mal, puesto que lo que nos ha ocurrido hoy estaba totalmente fuera de nuestra lógica. Quizás planeando las cosas con más tiempo, no nos salgan igual, quien sabe.

De la ruta de hoy hay que decir que es bonita. Discurre casi toda ella por callejas bastante anchas y muy transitables. Lo peor era la cantidad de agua que había por todas ellas, aunque eso le dé un aspecto mucho más bonito a todo el campo.

Las vistas muy parecidas a las rutas de nuestro entorno. Mucha encina y grandes alcornoques. Algunos almendros en flor. Muchas esparragueras con las que más de uno han disfrutado cogiendo sus frutos. Mucha jara que desprendía un fuerte olor, a punto de florecer.




Una fuente natural con su ermita destruida y muy antigua, nos ha sorprendido por el aspecto de su agua. La cual posee un alto contenido en hierro y según nos decían los autóctonos del lugar, mucha gente bebe de ella porque les va bien a su organismo. Algunos de nuestros compañeros se han atrevido a probarla. Yo, en ese momento estaba probando el fruto típico de Almoharin, el cual uno de los integrantes del grupo, nos ha dado a probar. Los higos pasos, que estaban deliciosos.



Después de comernos el bocadillo más rápido de lo normal, dado que nosotros tenemos otras costumbres a la hora de dicho tente en pie. Y en lugar de llevar una pieza de fruta o alguna barrita energética, como llevaba la mayoría de senderistas, hemos sacado nuestras viandas y alguna tortilla de cardillos que gentilmente nos había hecho mi mujer para todo el grupo. Además de nuestro pan autóctono del cual siempre podemos vacilar de ser pan autentico de leña. Así lo que era un bocadillo entre nosotros solos, se ha ido convirtiendo en un bocadillo concurrido, puesto que muchos de los senderistas se han animado a probar nuestros productos. ¿Quién se puede negar a probar un “cacho” de pan untado de patatera algo picante, regado con un trago de vino de nuestra tierra? Ya te lo digo yo, nadie.

Una vez recogido todos los bártulos hemos seguido andando. Sin duda ha sido el trozo más bonito de la ruta, una subida por una pendiente elevada la cual tenía unas vistas preciosas.
Por una carretera asfaltada, lo cual sigue sin gustarnos a la hora de andar, hemos alcanzado de nuevo el pueblo de la Zarza. Catorce kilómetros recorridos en una compañía entrañable y amena. Casi setenta personas nos hacíamos la foto de recuerdo y nos despedíamos hasta otra ocasión, que seguro que viendo el trato recibido, no tardara en producirse de nuevo.









  •  



Muchas gracias a Paqui y Julián, presidente y vicepresidente de la Asociación. Y en definitiva a todos y cada uno de los senderistas que hoy nos han acogido como si fuéramos familia suya. Así da gusto ir con tu mochila por la larga y vieja Extremadura, la cual nunca me cansare de escribir, es una gran desconocida por todos, incluidos sus propios habitantes.
Hasta otra.


1 comentario:

  1. Enhorabuena por la mañana que habéis pasado nuevamente. Ya me gustaría ser uno de vosotros...........

    ResponderEliminar

Capítulo 1.021: Finde de las tres "S"

  Santoña, Santander, Santillana del Mar. Nos volvimos a poner en carretera cuatro meses después de haber hecho el anterior viaje a Portugal...