Como prometí
en un foro de dicho pueblo, al cual acudí para preguntar por el pueblo y sus
piscinas naturales, me dispongo a hablar un poco de dicho lugar y de nuestro
viaje a él.
La verdad
que desde Huertas hasta Acebo hay un trecho largo pero merece la pena
recorrerle. Como seguimos nuestras costumbres cada vez que vamos a visitar algún
lugar, nos perdimos varias veces, ya lo sé, es fácil descargarse un plano y
tal, pero ¿Cómo vamos a dejar de lado el parar a la primera persona mayor y
escuchar de su boca y con su acento, sus explicaciones que muchas veces no te
sirven de nada?
Si vais a
visitar este pueblo alguna vez o sus piscinas, lo mejor es irse temprano, así
te aseguras coger un buen sitio aunque es cierto que aquello es tan grande y
hay tanta sombra, que cualquier lugar es bueno.
Te puedes
llevar la comida de casa pero os aconsejo que por un precio que merece la pena,
puedes comer en sus restaurantes a pie de piscina unos platos abundantes y de
buena calidad su comida. El trato de sus camareros fue exquisito para con
nosotros y no tuvimos ningún problema, reservando antes de la hora de comer tu
mesa, te aseguras que todo está en orden.
Después de
comer bajo la sombra de aquellos arboles enormes una siestita y luego un buen
baño para despejarnos, el agua estupenda, nada que ver con las aguas frías de
la “Vera”, estás se soportan mucho mejor y para los que queráis ir con niños
pequeños, es un sitio estupendo, una piscina que no les cubre y en donde ellos podrán
disfrutar más que sus padres.
Las vistas
estupendas te engullen a ti y a tu cámara de fotos, que si vas a este pueblo,
no podrás dejar atrás, te aseguro que querrás fotografiar todo lo que te
encuentras a tu paso.
Bueno, pues
desde aquí quiero recomendar este lugar porque no hay una verdad más grande que
la que diga un niño y si estos nada más levantarse lo primero que te preguntan
es “cuando vamos a volver”, es porque a ellos les encantó el lugar.
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