Desde que nos enteramos que iban a venir a actuar a nuestro querido y vecino pueblo de Belén, no dudamos en poder organizar dicha noche para poder volver a disfrutar de sus canciones, aunque solo sea por volver a retroceder en el tiempo por una noche. Me hace gracia la gente que dice cuando fallece alguien joven, las típicas frases de: "aquí estamos de paso" o " Aquí estamos de prestados", incluso la de "Aquí hay que llevarse por delante todo lo que podamos" y luego no lo ponen en práctica. Por suerte creo que no soy de estos últimos, los que no lo ponen en práctica, a la mas mínima y en cuanto entra dentro de mis posibilidades, me apunto a un bombardeo si hace fata, es lo que nos vamos a llevar...
Así, después de quedar con varios paisanos que pensaban igual que yo, nos desplazamos a Belén, un arrabal al igual que Huertas de Ánimas, de la ciudad de Trujillo. Donde las fiestas patronales hay que costearlas casi íntegramente, si queremos tenerlas. Por eso hay que mover muchos hilos y organizar muchos actos para llegar a este fin. Siempre seré un admirador de los arrabaleros, se llame el arrabal de una manera u otra.
El concierto de ayer estaba previsto para las once de la noche, y como suele pasar en este tipo de actos, nunca empiezan puntuales. Si encima te tienes que buscar la vida buscando equipos de música lo mas barato posible, siempre suelen surgir imprevistos de última hora. Menos mal que la espera fue menos pesada gracias a los tragos que pudimos echar antes y también gracias a la buena compañía que nos juntamos en dicho evento.
Gente de Belén, de Trujillo, de la Aldea del Obispo, y nosotros, los Huerteños.Creo que hubo poca gente para lo que merecía la noche, puesto que fue mucha la gente que me comentó que iban a ir y yo no los vi por allí. Peor para ellos.
Cerca de la una de la mañana y con muchas ganas de fiesta y de concierto, los Bordón 4 subieron al escenario. De los componentes de siempre, quedan dos de ellos, mas otro nuevo. Según su lema el cuarto bordón hoy por hoy es el público que asiste a sus conciertos. Y es verdad, puesto que hacia muchos años que no cantaba tanto en un concierto, es lo que tiene saberse todas y cada una de las canciones de este grupo, el cual durante muchos años, fue la banda sonora de nuestras vidas. Acompañándonos en nuestros primeros días de conducción, en nuestros primeros Walman, aquellos que comían mas pilas que el muñeco de duracel.
Entre canción y canción y algun que otro trago, fuimos degustando cada una de las canciones que nos deleitaron. Muchas a petición popular y otras que llevan en su repertorio. La verdad que impresiona escuchar como no han perdido el tono de sus voces a pesar de que los años no pasan en balde, y lejos de desafinar o incluso cambiar algún tono que otro, siguen como aquellos años en que estaban en pleno apogeo aquellos cuatro andaluces que se intentaban codear junto a Chichos y Chunguitos, a pesar de tener, por lo menos para mi, mucho mejores letras y música que estos otros.
Y entre Golpes de taberna y Palacio de cristal, pasando por un montón de canciones mas, fuimos pasando la noche, la cual se nos pasó volada a todos los allí presentes, que nos dejamos un poco de nuestras voces en la calle del pozo. Me gustó ver a varios amigos y amigas disfrutar en dicha actuación, puesto que muchos hacia años que no tenían la oportunidad de verles. Seguro que durante hora y media, se quitaron de encima por lo menos veinticinco años, como hice yo también.
Y como vuelvo a decir una y otra vez sin cansarme de repetirlo, "Aquí estamos de paso" Disfrutad de la vida todo lo que podáis, que nos quedan tres telediarios.
Gracias Bordón 4, por habernos hecho disfrutar una noche como hacia tiempo que no lográbamos.
Video
Fotos: Antolín Hueso
Vídeo: María José Santamaria.
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