domingo, 1 de julio de 2018

Capitulo 916: Las Médulas, Astorga y León.


Como verdaderos exploradores nos gusta seguir dándonos cita cada tres o cuatro meses siguiendo los pasos de nuestra organizadora Paqui. Cuando busca algún lugar que visitar la gusta hablar y comentar sus inquietudes al respecto del sitio elegido. Por eso no es tarea de un solo día organizar rutas tan bien preparadas.




La ultima que hemos tenido el placer de realizar es la famosa ruta de Las Médulas, en la que podemos retrotraernos en el tiempo y ponernos a imaginar la explotación de oro que durante doscientos años tuvieron los romanos. Es alucinante escuchar las explicaciones de gente preparada para ello y dejar correr tu imaginación ante tal obra. Mas de doce mil obreros estuvieron en este lugar buscando oro que según los resultados y el daño que hicieron a la naturaleza del lugar, jamás fue rentable.







Demasiado calor para caminar y mira que es difícil visitar lugares mas calurosos que el nuestro, pero la semana pasada vivimos uno de los fines de semana mas calurosos que conocerán en tierras leonesas. Con calma y tranquilidad vamos de aquí para allá viendo cuevas atravesando castaños enormes y retratando el momento y lugar. Muchas risas como siempre en nuestros viajes y es que son muchos kilómetros viajando juntos y ya nos conocemos todos. Muchas horas compartiendo el mismo habitáculo que nos hace tener mucha confianza.





El muerdino fue en un precioso merendero y a la hora justa, mas risas y buen rollo y seguir conociendo el lugar.








Cuando terminamos la ruta, esa cerveza que nos tomamos es la mejor de todas y es ahí cuando intercambiamos impresiones de lo vivido y volvemos a montarnos en el bus para llegar al campamento que montaremos en la preciosa ciudad de Astorga.
Llegada al hotel y acreditaciones, cada uno deja sus maletas en sus habitaciones y bajamos a comer. Una comida esplendida que todos degustamos con hambre. Seguimos con el buen rollo y mas risas.



La tarde libre, una siesta para descansar algo y visita turística por la ciudad. El palacio episcopal se lleva todas nuestras miradas ante tal belleza.

Compras y refrescarnos algo antes de ir a cenar. Buena cena para luego conocer la noche en Astorga. Los mas atrevidos trasnochan algo mas que los que prefieren ir a sus habitaciones a descansar. Sin duda es cuando la temperatura es mas agradable. Nos vamos a dormir para estar descansados ante la visita que nos espera el domingo a la ciudad de León, donde pasaremos el domingo.


Pero antes un buen desayuno para hacer acopio de energías, volver a recoger los bártulos y derechos al bus, donde una hora después estamos bajándonos en la preciosa e histórica ciudad de León.

Era mi primera visita a este lugar y sin duda que colmó todas mis expectativas. La catedral es impresionante y sin duda que me quedaría dentro de ella si saber la hora que es. Siempre me pasa lo mismo dentro de estas construcciones, mi mente viaja en el tiempo y me pongo en el lugar de quien trabajó en su obra y muchas veces mi mente no alcanza a saber como se podían hacer estos trabajos con tan pocos medios. Da pena salir del templo porque además se está bien fresquito pero es hora de la misa y desalojan a todos los turistas que pasamos de la liturgia.




Toca tapear por el barrio húmedo y recorrer la ciudad con mas bares por habitantes de España, la verdad que merece la pena probar diferentes tapas con cerveza fresca que apetece ante la calor que reina en la ciudad y que sus habitantes nos dicen en forma de broma, que hemos llevado nosotros hasta dicho lugar. Toca buscar algún lugar para comer antes de ir acercándonos al bus para iniciar el viaje de vuelta. Y aunque para algunos pueda parecer una paliza, los setenta que hemos ido en este ultimo viaje antes de bajarnos del autobús nos estamos apuntando para la próxima excursión.




Cuando se viaja a gusto, con buena gente y buen ambiente no da pereza ninguna ir al otro lado del mapa.
Gracias Paqui por estar siempre pendiente de todos, preocupándote por que todos disfrutemos y estemos lo mejor posible en nuestras excursiones.




Otro lugar conquistado que sin duda me ha vuelto a enamorar. Que suerte tenemos y que pocas gracias damos por ello.

Nos vemos por las callejas.






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