domingo, 28 de diciembre de 2014

Capitulo 623: Ruta en Berzocana.



Hoy para despedir el año senderista, nos propusimos cambiar la zona para realizar la ruta y hemos elegido la majestuosa y quizás, menos conocida para muchos, zona de las Villuercas. Sin duda alguna que nos queda mucho terreno por conocer y las Villuercas serán una de las zonas mas visitadas el próximo año por todos nosotros.




Así a las siete y media y bajo un radiante cielo lleno de estrellas, quedábamos en la plaza de Huertas, donde el hielo en los coches, nos avisaba de la importante helada que la noche anterior había caído. Hoy nos juntábamos ocho senderistas, los cuales hemos puesto rumbo a la panadería, para desde allí y con el pan bajo el brazo, poner rumbo hasta la localidad de Torrecillas de la Tiesa.
Llegando a Torrecillas la próxima localidad que debíamos cruzar era la de la Aldea centenera y desde allí y un poco confusos dado la poca señalización que existe, intentar encontrar la carretera que nos comunicaba con Berzocana.




Una hora y poco después de haber salido, llegábamos hasta el lugar donde comenzaba la ruta.
Hay que decir que no es muy conocido el lugar y que nos ha costado bastante dar con el, pero una vez aparcado los coches en una pista de tierra, la cual comunicaba el lugar con una casa rural, hemos comenzado a caminar.



Frío mucho frío y algo de aire hacía en el lugar, así que hemos tenido que abrigarnos y buscar una pronunciada cuesta para entrar un poco en calor. Rápidamente hemos comenzado a ver señales que nos dirigían bien, hasta el lugar que queríamos visitar.
Las cuevas de "Los morales" y la de "los cabritos", nos esperaban.




La primera cueva que hemos visitado es sin duda la mas larga, y también, la de peor accesibilidad, tanto, que yo por ejemplo no he podido entrar hasta el final. Esta tonta claustrofobia que últimamente tengo, me da por saco cuando visitamos estos lugares. Sin embargo, casi todos los componentes del grupo se han atrevido a entrar hasta el final, a pesar de que lo único que los alumbraba era la luz de los móviles.
Esperando en la entrada de dicha cueva a que salieran todos, nuestra imaginación volaba pensando en que en dicho lugar, nuestros antepasados se refugiaban de todo tipo de peligros que los acaecían.




Una vez todos reagrupados, hemos puesto rumbo hasta la siguiente cueva, la cual solo posee una habitación bastante amplia. Tanto, que viendo que la niebla y el frío se apoderaban del lugar, hemos decidido comernos el muerdino de pan en dicha cueva. Una experiencia única que a día de hoy un servidor no había realizado aun. Quizás con poca hambre por no haber andado lo suficiente, hemos recogido los trastes antes que otros días y hemos continuado la ruta creyendo que nos faltaba poco camino que recorrer.
La siguiente visita era al cancho de las sábanas, donde se encuentra otra cueva, esta con la particularidad, de que tiene entrada y salida. Aunque la salida no es para gente de comprensión ancha, como un servidor. Así que he tenido alguna que otra dificultad para poder salir de la cueva. Entre risas y algún que otro vídeo del cual no dispongo aún, hemos vuelto a la entrada principal, donde nos esperaban los que no se han arriesgado a cruzar la cueva.




Siguiendo caminando la niebla era cada vez mas espesa y hoy nos ha fastidiado las impresionantes vistas que hay en este lugar. Una pena, pero contra el tiempo no se puede luchar.

Buscando el ultimo lugar de visita llamado el risco gordo, hemos subido otra gran cuesta, la cual nos ha calentado a todo el grupo de nuevo. La niebla era tan espesa que no hemos podido ver este lugar, así que hemos decidido poner rumbo hasta los coches, los cuales hemos alcanzado después de llevar unos ocho kilómetros en nuestras piernas. Que a pesar de no ser muchos, la dificultad por donde se camina hacen que los mismos parezcan el doble de lo caminado.




Una vez en los coches hemos hecho una parada en el pueblo de Berzocana para visitar su iglesia catedral, la cual no hemos podido ver nada mas que por fuera, al estar cerrada a cal y canto.




Ya de vuelta comentábamos lo bien que lo hemos pasado haciendo espeleología , una ruta diferente a las que normalmente hacemos pero muy rica en cultura.
Algún día volveremos y espero estar curado y algo mas delgado, para visitar la primera cueva que hoy me ha quedado por ver.




Nos vemos por las callejas.
Feliz año a todos los lectores.














No hay comentarios:

Publicar un comentario

Capítulo 1.021: Finde de las tres "S"

  Santoña, Santander, Santillana del Mar. Nos volvimos a poner en carretera cuatro meses después de haber hecho el anterior viaje a Portugal...