lunes, 30 de noviembre de 2015

Capitulo 699: Ruta en Madrigal de la Vera. (Chorro de la Ventera)



Otro de los lugares que nos quedaban por conocer de nuestra comarca extremeña, decidimos ir este domingo en busca suya. Dejando aparcados a un lado todos los problemas semanales que uno pueda tener, los domingos los dedicamos tan solo a disfrutar de nuestras rutas, de los paisajes, del clima y de la buena compañía que solemos juntarnos domingo tras domingo. Aunque esta vez tan solo pudimos disfrutar de la ruta cuatro senderistas, una pena sin duda por los demás, puesto que la ruta de ayer la hemos catalogado como una de las mas espectaculares que hemos hecho hasta la fecha.
Seguramente que las fotografías que aquí publique hoy, tan solo os darán una idea del lugar tan impresionante que ayer tuvimos la suerte de conocer, pero lo suyo por mucho que os cuenten es ir a verlo en directo. Cerrar los ojos, oír el agua caer. Abrir los ojos de nuevo y ver la colonia de buitres que allí al lado, han encontrado acomodo, y a la vez, respirar el olor entre mezclado de romero, con la jara y algunas hierbas mas que este otoño primaveral, por allí abundan.


El caso es que a las siete de la mañana nos volvimos a dar cita en la plaza de Huertas, lugar desde donde salimos habitualmente. Esta vez con el pan comprado ya por parte de uno de los del grupo, no hizo falta pasar por la panadería. Por lo que pusimos dirección Madrigal, del cual nos dista una hora y cuarto de viaje, el cual le hicimos casi entero por autovía.


El pueblo de Madrigal es conocido como la Galicia chica, por la abundancia de agua y sus pastos verdes durante casi todo el año. Sin duda tiene suerte de tener en su entorno dos gargantas conocidas. Una, la de los Minchones la cual hace de frontera con sus vecinos de Villanueva de la Vera, donde hace algún tiempo ya hicimos una ruta. La otra garganta es la de Alardos, la cual hace frontera con la provincia de Àvila, y donde en verano se refrescan los vecinos y visitantes.
Este pueblo tiene unos mil setecientos vecinos los cuales son llamados "Madrigaleños".

Pues a unos cuatro kilometros hacia el norte, arranca la ruta que ayer realizamos y que tanto nos sorprendió. El pueblo de Madrigal nos recibió con tres grados de temperatura y aunque el sol había salido ya, todavía no calentaba lo suficiente como para quitarnos algo de abrigo, por lo que los primeros kilometros los hicimos bastante arropados.
El primer contratiempo le tuvimos muy pronto ayer, puesto que después de llevar andados mas de seiscientos metros, nos acordamos de que el pan se había quedado en el coche, por lo que hubo que darse la vuelta en busca de el. "Un muerdino sin pan ni es muerdino, ni es na"


Con el pan en las mochilas tuvimos que acelerar un poco la marcha para no andar muy tarde, aunque bien es cierto que cuando uno sale a practicar senderismo, no puede llevar prisas ninguna, puesto que no sabes que contratiempos te pueden surgir.
Los tres primeros kilometros de la ruta son de bajada y como sabíamos que la ruta no era circular y había que volver por el mismo sitio, íbamos bromeando sobre la cuesta arriba que nos esperaba a la vuelta, como si no estuviéramos ya acostumbrados a subirlas mas duras que las de ayer.
Con buen firme en el camino, pronto llegamos a un puente donde las cristalinas aguas de la garganta, nos invitaban a echar un trago de ellas, cosa que hicimos un poco mas adelante, en un chorro de agua que caía de entre dos piedras. Da gusto ver el agua correr por cualquier lugar en este pueblo.


Una vez refrescadas nuestras gargantas, seguimos andando y fotografiando el lugar. Las vistas son impresionantes y la Sierra de Gredos con su pico mas alto en la lejanía nos dejaba ver algunos neveros de anteriores nevadas caídas.


El camino se empinaba por momentos y el desnivel iba acumulándose poco a poco pero de manera ligera al estar el camino construido en zigzag, la subida parecía mas ligera de lo que en realidad es. Y seguimos acumulando kilometros y de repente nos encontramos con un cartel que nos prohíbe el paso hasta donde queríamos llegar. Aunque ya estábamos avisados de tal prohibición, decidimos continuar sin salirnos del camino en ningún momento y sin apenas hacer ruido, por si nos descubrían y nos invitaban a darnos la vuelta, pues la única manera de acceder al "chorro" es garganta arriba con la dificultad que ello conlleva.

Todo el camino es privado y si vais alguna vez, es mejor no ir en grupos grandes para no armar mucho escándalo y por supuesto no salirse en ningún momento del camino. que te lleva directamente hasta el lugar donde finaliza la ruta, que es el "chorro de la Ventera", aunque del final del camino hasta dar con el, hay que andar un trozo campo a través, quizás la parte mas dura de la ruta, aunque una vez que llegas al lugar, lo único que salia de nuestras bocas eran las palabras "merece la pena".

Y por supuesto el muerdino tenia que ser allí. Un lugar privilegiado que enamora nada mas conocerlo. Que nos queda sin palabras al ver la longitud del salto de agua. Que hace que hagamos cientos de fotos y que las miradas vuelvan una y otra vez hasta dicho lugar.
Allí sentados comiendo nuestras viandas el tiempo parece detenerse y sin darnos cuenta se nos hace tarde, es una pena pero hay que volver y dejar atrás este lugar mágico que nos conquistó ayer a los cuatro privilegiados que disfrutamos de el.


La vuelta al ser por el mismo lugar podía parecer un poco monótona, pero solo con las vistas que hay en este lugar, se hace con ganas e ilusión. Lástima que una lesión de uno de los componentes del cuarteto, nos hizo ir un poco mas rápido a los otros tres, para bajar con el coche en su busca. Suerte que tenían acceso los coches, si no, hubiéramos tardado algo mas en acabar la ruta de ayer, que tenia una longitud en total de casi dieciocho kilometros. Por eso decimos que de senderismo hay que ir sin prisas y preparado para cualquier contratiempo. Y la verdad que hasta la fecha hemos tenido mucha suerte en este aspecto, esperemos seguir contando con ella.


Una vez en el coche y ya de vuelta a casa, vamos comentando lo vivido durante la ruta y la suerte que tenemos de poder conocer regalos de la naturaleza, casi al lado de casa.
Si alguna vez os atrevéis a ir a conocer este lugar, seguro que os causará la misma impresión que a nosotros nos causó en el día de ayer, donde de nuevo decidimos cambiar la cama o el sofá, por naturaleza en estado puro.

Nos vemos por las callejas, montes o ríos.

La ruta



















lunes, 23 de noviembre de 2015

Capitulo 698: Ruta en Cabezuela del Valle.



Esos locos senderistas a los cuales tengo el gusto de pertenecer, que dejamos la cama con algo de pereza, mas aún cuando asomas la cabeza a la calle y ves la helada que existe en las lunas de los coches. Da igual, la ruta preparada para el día de ayer prometía grandes aventuras como así fue. Seguimos comentando en momentos como los que pasamos ayer los cinco amigos que fuimos, que sin estas rutas de los domingos no hubiéramos conocido ni la cuarta parte de los muchos pueblos que hoy en día, tenemos el gusto de conocer. Ademas de sus gentes que en muchas de las rutas, nos vemos obligados a entablar mas de una conversación y hasta el momento, nadie nos ha tratado mal en ninguno de los muchos parajes extremeños que tenemos recorrido y que si por bien es, seguiremos recorriendo domingo a domingo, cuando unos pierden el tiempo debajo de las sabanas y otros llegan a esas horas en busca de ellas...

El caso es que a las siete de la mañana y con temperatura bastante mas fría que en días anteriores, nos hemos dado cita los tres machos y las dos sùper hembras que nos atrevimos a desafiar la monotonía del domingo. Sin esperar mucho rato nos hemos puesto en camino y la siguiente parada ya la sabéis todos los que leéis la crónica de las rutas. La panadería del motor, donde nos espera el pan calentito y crujiente, que algunas horas mas tarde, nos servirá de acompañante, junto a las viandas de la tierra. Ayer no podía estar mas caliente el pan, tanto que tuvimos que esperar cinco minutos para que lo sacaran del horno, así que podéis imaginar el ambientador que llevamos todo el camino, hasta la localidad de Cabezuela del Valle, la cual no habíamos andado aun.


Este pueblo esta habitado por mas de dos mil cuatrocientos habitantes, por lo que viene a ser mas o menos como Huertas de Ánimas. A sus habitantes se les conoce como "cabezoleños" y fueron muchos los que se cruzaron con nosotros durante la ruta. Ahora toca curar a los cerezos y ademas podarlos, puesto que la mayoria ya a mudado sus hojas y ahora pueblan los suelos. Da gusto andar pisando hojas a pesar de que, mas de una vez, te puedas llevar algún susto por culpa de algún resbalón o algún desnivel del terreno, tapado por dichas hojas.

Una hora y cuarto después de haber montado en el coche, llegábamos a nuestro destino. La ruta la teníamos descargada previamente pero estábamos casi seguros, que acabaríamos haciéndola como a nosotros nos pareciera, cosa que nos pasa cada domingo.
El lugar hasta donde queríamos llegar es conocido en el pueblo de Cabezuela como el "Canchal Banderín" y se puede ver dicho conjunto de piedras, desde el mismo pueblo, por lo que ya sabíamos de ante mano que nos esperaba una cuesta. Aunque la verdad que no demasiado pronunciada, puesto que el camino va haciendo rodeos para que se pueda subir bien.

El frío que hacia allí era poco mas o menos que el que habíamos dejado en nuestro pueblo, por lo que una vez colgadas las mochilas y bien abrigados, nos pusimos a caminar buscando la primera y única cuesta, que llega hasta el mismo cancho.
Los primeros arboles que nos encontramos son cientos de cerezos que abundan como casi todo el Valle del Jerte, se nota mucho que sus dueños viven de ellos puesto que los miman y cuidan muy bien, Por eso puedes contemplar unos bancales bien construidos y los cerezos simétricamente podados, para que la posterior recolección de la cereza, les sea todo lo mas sencillo posible.

Y seguimos ascendiendo pisando ahora hojas de castaños que existen en dicha ruta. Las ultimas castañas que quedan por el suelo nos llaman la atención y me guardo algunas en los bolsillos para ir entretenido comiéndolas mientras seguimos andando. Las vistas según nos vamos volteando son espectaculares y el pueblo le vamos dejando paulatinamente a inferior nivel del que nosotros vamos obteniendo. Empezar la ruta a quinientos metros y acabarla a mil doscientos y algo, puede daros una idea de lo que hemos ido ascendiendo poco a poco, sin prisa pero sin pausa, riendo, hablando y disfrutando de las vistas que solo el Valle del Jerte te puede dar en esta época del año.



Una vez en el "Banderín" hemos buscado un poco de refugio del aire que allí soplaba con mas intensidad para comernos el muerdino, eso si, después de hacer decenas de fotos desde lo mas alto de la ruta. Que bueno está todo lo que llevamos y que pena da saber que hasta el próximo domingo no volvemos a probarlo...


Una vez recogido todo el campamento y algo mas de suciedad que nos hemos encontrado, hemos comenzado el descenso, el cual le hemos hecho bastante bien, a pesar de que la vereda no se veía al estar llena de hojas. Los robles dan un color impresionante y el frío de momento nos abandona. Nos mosquea que temple la orilla, mas aun viendo las nubes que teníamos encima. Y de repente y bajo nuestro asombro, los copos de nieve hacen su aparición y aunque han sido pocos, para una apuesta hemos visto nevar un veintidós de noviembre en en Valle.




Entre mas risas y cachondeo hemos ido acortando los metros que nos quedaban hasta el coche. Un poco cabreados por la suciedad que hemos visto al comienzo de la ruta muy cerca de la garganta que baña el pueblo. Deberían de tomar nota las autoridades o quien le corresponda, pero da mal ejemplo ver tanta basura derramada por las cunetas y encima de zarzas y matorrales. Es cierto que es la primera vez que veo en todo el Valle algo así, por eso quiero denunciarlo públicamente antes de que se unan mas cerdos al que ya hay en el pueblo.



Y justo a la una del mediodía, estábamos montando las mochilas en el coche y después de comernos las ultimas frutas y saborear el ultimo trozo de chocolate, hemos emprendido el camino de regreso el cual le hemos hecho por el Parque Nacional de Monfrague, para poder disfrutar de sus vistas.

Nos vemos por las callejas.

La ruta












jueves, 19 de noviembre de 2015

Capitulo 697: La vida empieza hoy.



Me levanto del mismo talante que me acuesto. Me miro al espejo y veo una arruga nueva; me da igual, una mas no me va a hacer sentirme mas vieja. Como él dice, "así ningún hombre se va a fijar en ti. No quiero tener que enfrentarme con nadie por culpa tuya".

Esos celos no le dejan vivir, pobre, con lo buena gente que es...
Lo está pasando mal desde que se quedó en el paro. Es normal. Mírale, que a gusto está dormido en la cama, me dan ganas de acercarme a él y besarle. Mejor no, no se vaya a despertar y me forme "el tres de mayo". Necesita descansar antes de salir a buscar trabajo. Con mi sueldo solo no llegamos...

Despierto a los niños, los visto, los lavo, los preparo el desayuno, antes de ir al colegio. Podía llamarle y decirle que me echara una mano. Al final llego por los pelos con hora al trabajo. No me atrevo a despertarlo. Mando callar a los niños que me preguntan por él. No le despertéis, está cansado y necesita dormir. ¿Nos lleva él al cole?,_ No, venga deprisa que llegamos tarde. Id bajando mientras le dejo el desayuno preparado a vuestro padre para cuando se levante.....

Y mientras voy conduciendo voy pensando en la ropa que tengo que planchar cuando llegue, en las tareas de los niños, ducharles, hacer la cena y antes pasarme por el sùper a comprar.
En la radio hablan de felicidad. La gente llama para expresar su forma de ser felices, otros confirman que no lo son aunque lo crean. ¿Y yo? pienso de forma rápida en mi manera de vivir y creo que soy un poco feliz, aunque pienso que debería serlo mas. ¿Salgo los fines de semana con mi marido? buff, hace un mundo que no salimos, aunque él no se queda ni uno solo en casa. ¿Salgo con las amigas? buff, no se ni donde viven ya, mis amigas de toda la vida. Desde que tuve a mi tercer hijo perdí contacto con ellas. ¿Como estarán? Hoy cuando llegue busco su teléfono y las llamo para preguntarlas... aunque, mejor no. Seguro que él se enfada conmigo si quedo con ellas.

La discusión de mis hijos me saca de mi letargo justo antes de llegar a la puerta del colegio, donde paro para dejarles.
!Esta tarde os recojo, portaos bien! les digo antes de seguir hasta mi oficina.
El padre de un compañero de mi hijo el mayor me hace señas para que detenga el coche.
!Señora! esta tarde tenemos una reunión aquí en el colegio. Se lo digo por si su hijo no le ha dicho nada.
_Gracias, Si, lo sabia, pero no puedo venir por el trabajo. A lo mejor viene mi marido si le vaga.
_ Esta bien, hasta luego y que tenga usted buen día.

Llego al trabajo y todos los días lo mismo. Correr, todo el mundo tiene prisa, estrés y voces. Mal ambiente y ganas de dejarlo, pero...es de donde comemos ahora mismo. Si mi marido encontrara trabajo...

Estoy pensando que va para cuatro años desde que le despidieron y a día de hoy, no le ha salido nada. Y mira que el sale todos los días a buscar. Aunque pensado fríamente, nunca me dice si ha hecho alguna entrevista en algún lugar. Lo único que sabe decir cuando le pregunto y a voces es: "Nada, coño, que no me quiere nadie para trabajar". Y a mi me da mucha pena verle tan triste y cabreado, normal que el otro día me diera un empujón cuando le mandé que saliera a tirar la basura. Aunque fue peor el día que le comenté que un compañero de trabajo mio andaba buscando a alguien que le ayudara en una mudanza. Se cabreó tanto que me dio un guantazo, aunque flojito, eso si.

Creo que mañana me voy a tomar el día libre y le voy a decir que salgamos a comer. Dejaremos a los niños con mi madre y pasaremos el día fuera. Creo que nos lo merecemos a pesar de no estar pasando una buena racha. Veras que ilusión le hace cuando se lo diga. Aunque a lo mejor no, primero tengo que ver que partido echan en la tele, porque si le gusta no querrá salir. Lógico. El fútbol es uno de sus hobbys y lo antepone a todo. Bueno a todo no. Salir con sus amigos está antes que el fútbol. ¿No tendrá alguna cena con ellos este fin de semana? Seguro que si. Ellos le apoyan mucho en estos momentos difíciles y le ayudan a encontrar trabajo, aunque de momento no hay nada para él.

Si algún día me deja yo no se que voy a hacer. Me moriría de pena. Y mis hijos también. Aunque es verdad que su padre no es muy amable con ellos y juega muy poco. Viene todo por lo mismo. Esta depresión que tiene le esta poniendo años encima... bueno y a mi también.


Algunos meses después:

Nuevo caso de violencia de genero. No había denuncia previa. Deja tres niños huérfanos. El marido se suicidó después de matarla. Los vecinos dicen que era un matrimonio normal, como todos los del bloque. Alguna discusión de vez en cuando y poco mas. Él no trabajaba desde hacia varios años, le habían despedido.

Aunque otro vecino nos cuenta que se veía venir. Estaba todos los días borracho en el bar. Era muy agresivo con los clientes y casi todas las noches le tenían que echar. Este era de los que decía: "Que trabaje mi mujer, que para eso la tengo" Lo raro es que no tuviera ninguna denuncia de su esposa, porque alguna que otra vez la vimos con mas maquillaje de la cuenta en la cara....

Y así una tras otra y todos decimos que ni una sola mas, pero los casos se siguen sucediendo. No aguantes lo inaguantable. Vive, disfruta, no toleres mas de la cuenta. Vete si no te trata como a una reina. La vida no termina después de una denuncia. En definitiva si tu quieres, "La vida empieza hoy"










miércoles, 18 de noviembre de 2015

Capitulo 696: Los Praecones o pregoneros.



Este oficio anda de capa caída como tantos otros, y ya prácticamente no queda ninguno por los muchos pueblos y algunas ciudades, donde algunas décadas atrás eran imprescindibles.
El mundo va tan deprisa que muchos ni reparamos en la importancia que estos trabajadores tenían en sus oficios.

Escuchando la radio han comentado que, en no recuerdo que pueblo, han realizado una aplicación para poder descargarte en el móvil, donde dicho invento va a hacer las veces de pregonero y cada vez que dicho ayuntamiento quiera comunicar algo, lo escribe en esta aplicación y llega al móvil de todos los vecinos; incluso puedes poner de tono de aviso la trompetilla que los pregoneros usaban por aquellos años.

Pero hoy en día sigue habiendo pregoneros y pregoneras de segunda mano, que sin cobrar un duro por hacer este trabajo, le desarrollan a la perfección. Y es que es enterarse de algo y no paran de anunciarlo a bombo y platillo, como si su trabajo fuera ese, a pesar de no tener trompetilla, ni decir el pregón, justo en mitad de la plaza del pueblo. Encima hoy en día lo tienen mejor que los antiguos "praecones", puesto que ahora por las redes sociales, desempeñan su trabajo a la velocidad de un rayo. Y aun sin haber confirmado el pregón a recitar, ellos o ellas, sueltan la noticia como si dejaran de cobrar un dinero ficticio, que les podrían dar por cada pregón recitado.

Unos piensan que ejercer este oficio hoy en día debe de ser una enfermedad. Otros dicen que es un homenaje a los antiguos pregoneros y yo la verdad que no se que pensar. Si quien ejerce este oficio es porque en su vida le falta algo, o por si lo contrario es que disfrutan haciendo esto, sin cobrar nada, tan solo sabiendo que tienen al que esta en frente o al otro lado del móvil, pendiente de ellos el rato que dura el pregón. Se sienten tan protagonistas en ese momento, que el mismo "Clint eastwood" estaría celosos de ellos ante tal robo de papel de actor principal.

Si alguno de los pregones difundidos resultan ser mentira o algo manipulados por los pregoneros, ellos son los primeros en quitarse del medio y evitan ser culpabilizados por este hecho, echando rápidamente balones fuera y atribuyendo el pregón falso, a cualquiera que les venga en ese momento a la cabeza.

Y así seguimos los demás, intentando que a estas personas que desean ejercer este oficio completamente gratis, se les reconozca de alguna manera por parte de los ayuntamientos o por la autoridad competente de cada pueblo, donde ejerzan este trabajo. Si no por ellos, por lo menos que los demás seamos capaces de reconocerlos e intentemos entre todos desenmascararlos.

Yo propongo que una vez nombrados pregoneros oficiales, pongamos una derrama cada uno para comprarles la trompetilla de oro y poder regalársela en un acto festivo, en mitad de la plaza del pueblo; eso si, después de uno de sus habituales pregones, aunque sea falso o un "pelin" exagerado según ellos.

Y dicen que se va a perder este oficio...ya os digo yo que goza de buena salud.













lunes, 16 de noviembre de 2015

Capitulo 695: Treinta preguntas sin respuesta alguna.



Y cada vez mas gente se sube al carro del "ojo por ojo", incluso aquellos que siempre estuvieron a favor de la paz; siempre y cuando, claro está, no tocara a sus familiares y amigos.
Cuando esto pasa el ser humano desprende odio y ganas de venganza por los cuatro costados y ya quedan pocos que sepan o quieran perdonar a sus asesinos.

!Que difícil es aplicar la palabra perdón cuando a uno le han destrozado la vida!
Y otros mientras, muestran su apoyo en redes sociales o en minutos de silencio organizados a toda carrera, para que nadie nos pueda tachar de no ser solidarios....

 ¿Que adelantamos con estos minutos de silencio? ¿estar en paz con nuestras conciencias? ¿Pasa algo si no te presentas en alguno de ellos? ¿Podemos solidarizarnos también con las victimas inocentes que seguro que hay, en los ataques aéreos producidos en suelo teóricamente "Yihadista"? ¿Somos distintos y raros si organizamos un minuto de silencio por ellos y nos sumamos a el? Y el que no lo haga, ¿se le puede tachar de querer guerra inminente? Y si los próximos somos nosotros o nuestros familiares, ¿nos apetecerá ver tales imágenes una y otra vez en todas las televisiones estatales? ¿Nos gustará ver los lugares de las masacres llenos de flores y velas? ¿Nos gustará ver minutos de silencio incluso en la pedanìa mas pequeña del país? ¿Nos gustará que venguen a nuestros muertos o por el contrario trataremos de perdonar a los asesinos?

¿Seguiremos confiando en los políticos que nos han metido en esto? ¿Existirán nuevos políticos que sepan sacarnos de esto? ¿Habrá gente preparada para el dialogo por encima de las armas? ¿Podrá el odio instaurarse en nuestras conciencias y seremos capaces de distinguir a quien queremos mas o menos? ¿Volverá el racismo (si es que se ha ido alguna vez) a nuestra sociedad? ¿Seremos capaces de ver abrazarse a un moro y a un cristiano? ¿Las fiestas de moros y cristianos las celebraremos este año con fuego real? ¿Seguiremos vendiendo armas a quienes nos asesinan con ellas? ¿seguiremos dependiendo del petroleo toda nuestra vida y cobrando por usar el sol?

¿Podremos seguir viviendo como hasta ahora, como si nada hubiera pasado? ¿Tendremos que construir bunkers y refugiarnos en ellos? ¿Nos importara un pimiento el no tener trabajo y daremos mas importancia a la guerra? ¿Veremos a los buitres de siempre aprovecharse de esta situación? ¿Nos durará mucho el recuerdo de los últimos atentados?

¿Podrán conocer generaciones venideras un mundo en paz? ¿Seremos capaces de perder nosotros para que ganen nuestros herederos? ¿Vendrá el Mesías a morir por nosotros en la cruz, antes de que siga muriendo gente en nombre de su padre?

¿Nos dejaran ser felices o intentarlo por lo menos? ¿Dejaremos de jugar a ser guerreros y nos vestiremos todos iguales? ¿Dejaremos de creer en Dios, Alà, Yhavè y Jehovà y aprenderemos a vivir sin religiones ni fanatismos?

¿Alguien será capaz de contestarme estas preguntas, dándome respuestas creíbles y convincentes, que hagan en mi cabeza una persona normal?...


martes, 10 de noviembre de 2015

Capitulo 694: Una mujer en toda regla.



Se llama Encarna, aunque bien es verdad que el nombre es lo de menos. Han sido muchas las mujeres que a lo largo de la historia, se han ganado el reconocimiento de todos los que estamos a su alrededor. Bien por unas cosas u otras. La vida ha cambiado tanto para bien, que historias como la de esta mujer o parecidas a ella, parecen muy lejanas en el tiempo.

Seguramente que ellas crean que no merecen que nadie les piropee, ni les diga lo valientes que fueron, ni que su lucha constante hizo a su familia feliz. Pero a uno cuando le llegan estas historias, le tocan la fibra y la máquina de escribir se pone en marcha. No quiero callarme, ni guardarme sus vivencias para mi. En mi blog tienen preferencias esta gente, antes que cualquier tontería de las muchas que escribo y seguiré escribiendo mientras no me falten las ganas de hacerlo. Pero siempre las compartiré con todo el que las quiera leer.

Para recortar la historia no por pesada, si no porque me harían falta cientos de hojas para escribirla. Pongamos que nos situamos en una familia cualquiera de las muchas extremeñas que siempre se han buscado la vida, de una forma u otra. Ella dice que no, que no se puede igualar a cualquier familia, puesto que su padre era pudiente y tenían asistenta en casa. Incluso ella pudo estudiar todo lo que quiso, aunque no acabara ninguna carrera. Me cuenta, mientras nos tomamos un descafeinado, endulzado con sacarina, que ella tuvo suerte, mas que muchas de sus amigas de infancia que muy pronto tuvieron que ponerse a trabajar. "Yo lo tuve que hacer cuando la vida dejó de sonreírme".

Se casó con el único novio que tuvo, como era costumbre por aquellos años. Aunque me dice entre risas, que él tenia otra novia, pero que se fue a vivir a Zorita y a su amigo por entonces, no le hacia mucha gracia el tener que ir todos los días tan lejos, perdiéndose lo que sus amigos hacían en Trujillo. "Venia y me lo contaba todo a mi". "Que estaba cansado de viajar hasta Zorita" , "que la iba a dejar"..etc.
 El caso es que sin darnos cuenta no podíamos estar el uno sin el otro. Así surgió nuestro noviazgo. Y no conocí otro hombre, ni tampoco me hizo falta. A los seis años de noviazgo nos casamos. Fuimos muy felices, nos reímos muchísimo y no lo pasábamos muy bien juntos. Como todos los matrimonios tuvimos días buenos y días menos buenos, pero el amor lo podía todo y tirábamos hacia adelante. Tuvimos dos hijas y les dimos todo lo que pudimos darles. Queríamos que estudiaran y nos volcamos en sus estudios. Con el sueldo de mi marido nos llegaba lo justo para ir sobre viviendo, pero una vez que mi marido cayó enfermo, la paga que le daban no llegaba para seguir igual. Yo me opuse a que mis hijas dejaran los estudios, así que un día le comenté a mi marido que iba a buscar trabajo. A él no le hizo mucha gracia en un principio, pero al verme tan decidida no opuso resistencia a mi búsqueda.

Me dice Encarna que ella no había trabajado en la vida, (como si llevar una casa no fuera trabajar, pensaba yo) pero no por eso se amilanó; y una mañana se puso sus mejores ropas y se encaminó al parador de turismo, el cual estaba y está, cerca de su casa. Pidió entrevistarse con el director y este, creyendo que era una clienta que iba a encargar algo, la acogió encantado. Cuando este hombre recibió la noticia de que lo que buscaba aquella señora era trabajo, su cara era todo un poema, (me cuenta Encarna muerta de risa) y no fue capaz de decirme que no, cuando le expuse mi situación. Me despidió igual que me recibió, besándome la mano. Y diciéndome que intentaría hacer algo para darme trabajo. Y si lo hizo, a los pocos días me llamó. Primero para días sueltos y luego me hizo un contrato de seis meses.

El trabajo era extraordinariamente agotador. Trabajar en el lavadero de un lugar tan grande, con tanta ropa que lavar y planchar, a una no la da tiempo ni a rascarse. Llegaba a casa muerta, me tomaba una pastilla y me acostaba. Y así muchos días. Mi marido me miraba con pena al verme tan agotada, pero yo le sonreía y le decía que ya me acostumbraría al trabajo...Pero era imposible acostumbrarse a tanto trabajo. Lo único que me tenia en pie, era el recuerdo de mis hijas estudiando.

Y así fue pasando el tiempo, mis hijas sacaron sus carreras y a mi por entonces despues de muchos años, me quisieron hacer fija en mi puesto de trabajo, pero mi espalda estaba partida y después de tener que darme de baja un tiempo, no quise seguir trabajando y me vine a casa.

Pero la vida me tenia reservado un acontecimiento fatal para mi. El día que enterramos a mi madre, al llegar la noche un infarto se llevó también a mi marido. (Las lágrimas empezaron a brotar de los ojos de Encarna, bueno de Encarna y de los míos al mismo tiempo. A pesar de hacer mas de quince años el recuerdo aun le dolía.)
 Hasta hace cuatro días no he empezado a salir de casa. Como si una tuviera la culpa de aquello que pasó, me encerré en casa y fui envejeciendo a marchas forzadas. Y no es porque mis hijas no me animaban a salir veces, pero yo me negaba a hacerlo. Ahora me he echado unas amigas y salimos de vez en cuando a tomarnos algo. Esto me lo cuenta Encarna con una sonrisa en la boca, puesto que dice que se lo pasan bien y se ríen mucho.

Lo que no se perdona, según ella, es no haber llorado a su madre en su muerte. (La muerte de mi marido lo absorbió todo y me dejó tal vacío a mi alrededor, que no me dolía nada mas que eso.)

Yo la consolaba diciendo que era normal su forma de actuar, que tal palo era de los mas dolorosos que a una persona le pueden dar en la vida.
 Acabándonos de beber el descafeinado, Encarna me cuenta que su marido fumaba mucho y mira que cada vez que íbamos al medico decía que lo dejaba, incluso mas de una vez tiró el paquete en el primer contenedor de basura que nos encontramos al salir de la consulta. Pero luego pasadas unas horas, compraba otro paquete en el primer estanco que se encontraba.

Sus conversaciones giran todas alrededor de su marido, no puede olvidar tantos años a su lado, a pesar del paso del tiempo. Si viera esto, si viera lo otro y así se van pasando los días y yo que he tenido el gusto de conocer a esta gran mujer, me alegro de trabajar de albañil y emparejar con gente que me logra emocionar y que me encanta conocer.

Por eso mujeres como Encarna y muchas como ellas, siempre serán referentes nuestros en lo bueno y en lo malo y sus historias tendrán un hueco en mi blog y también en mi corazón. Con gente así da gusto levantarse e ir a trabajar, sabiendo que al otro lado de la puerta nos espera, una mujer en toda regla... una mujer de bandera, con la cual me tomaría cualquier día de la semana, un descafeinado con sacarina y charlaríamos de nuestras cosas...




















Capítulo 1.021: Finde de las tres "S"

  Santoña, Santander, Santillana del Mar. Nos volvimos a poner en carretera cuatro meses después de haber hecho el anterior viaje a Portugal...