lunes, 7 de septiembre de 2020

Capitulo 976: Las grandes olvidadas.



 Con la espalda dolorida de soportar el peso de su familia además de su trabajo recibe a un nuevo día. Sentada en la cama pone en movimiento el ordenador de abordo y pronto pasan por su mente cientos de cosas que hay que hacer en casa. El maldito virus ha cambiado su forma de actuar y sin duda que la ha hecho mucho mas desconfiada. Los besos y abrazos los ha ido cambiado por saludos secos de los que ya existían en su lugar de trabajo, donde como en otros sitios, a las limpiadoras se las trata como despojos y muchos creen tener potestad para mandar en ellas como si estuvieran a su cargo.


Si ya era difícil antes la convivencia con los compañeros que ayudaban poco a que el trabajo fuera mas ameno, con la nueva normalidad se vuelve insoportable. Recuerda aún los primeros días del confinamiento donde con mas miedo que vergüenza debía de salir a trabajar sin saber lo que podía encontrarse fuera de casa y con el miedo de traerlo encima. Las medidas de seguridad debía costearlas ella misma ante la pasividad de su empresa que como muchas otras, dejaron a sus empleados a su libre albedrío.



Desayuno relajado donde se planifica el día, si hoy toca lavadora mañana plancho y pasado me pongo con los dormitorios, aunque los baños no los puedo descuidar. En casa abundan hoy las mascarillas, aquellas que por el mes de marzo fueron imposible de conseguir, ni siquiera quienes las fabricaban en el pueblo le brindaron alguna, pero ella supo arreglárselas para tener de quita y pon, cosa que con los guantes fue mucho mas difícil.


Si antes los trabajadores de la empresa exigían, con el miedo al contagio lo hacen el doble y quieren que por el mismo sueldo, nuestras limpiadoras dupliquen sus trabajos como si hasta la fecha se estuvieran tocando el moño. Y cualquiera se cree en su derecho de exigirlas como si ellas tuvieran que acatar cualquier orden desde el primer empleado hasta el ultimo, que si viene con ganas de jugar al baloncesto, deja la mitad de los días las hojas arrugadas alrededor de la papelera, sin duda no me extraña que no se haya dedicado profesionalmente a este deporte, le deberían de dejar el cepillo, la escoba y la fregona un par de meses para ver si le volvían a entrar ganas de jugar en la oficina a encestar en la papelera. 


Y en televisión ni siquiera una mención para ellas, muchos trabajos esenciales pero ellas siguen ninguneadas como si estuvieran ahí para pasar el rato y su trabajo fuera totalmente prescindible, que ojalá y lo hubiera sido en época de confinamiento donde se las podía ver trabajando angustiadas y con ganas de llorar por no saber a lo que se estaban enfrentando, con el acojono y responsabilidad de que el bicho no entrara en su empresa, puesto que seguro que las primeras acusadas serían ellas, como ha pasado en mas de algún lugar de trabajo.


Por eso desde aquí, quiero daros las gracias a las-os que os dedicáis a la limpieza, porque sin vosotros esto hubiera sido mucho peor, y aunque la subida de sueldo ni siquiera la han contemplado en ninguna empresa, os merecéis mas que nadie ese aumento que en lugar de llevároslo en los bolsillos os lo lleváis en las espaldas, esas que cualquier día dirán basta mientras el que juega a encestar folios arrugados, seguirá creyendo que vosotras estáis a su merced.


Me quito el sombrero por vosotras-os, gracias.

viernes, 4 de septiembre de 2020

Capítulo 975: De donde venimos. (Fiestas del Rosario de 1973)




Corría el año 1973 cuando en Huertas de Ánimas se preparaban las fiestas del Rosario de ese año, que habían estado precedidas de unas fiestas improvisadas el año anterior, en la que la comisión de por entonces apenas tuvo tiempo y formas de programar nada, al hacerse cargo de las fiestas un par de semanas antes de dicha cita. Con previsión de que no les pasara igual, el pueblo se movilizó y en la directiva de ese año lograron juntar a 17 personas. La comisión saliente se despidió con este articulo el cual me emociona leer:

DICEN que las fiestas de nuestra patrona terminarán por acabarse. Nosotros no opinamos así.

Si, es verdad que cuando llegan las vísperas nadie quiere hacerse responsable para que estas fiestas continúen con más fervor y entusiasmo. Pero al fin siempre hay un grupo de señores que con ingenio y ayuda de todo el pueblo y fuera de el, hacen lo imposible para que todos quedemos contentos.

Sabemos por experiencia lo que han pasado las comisiones anteriores. Nosotros, gracias a sus consejos y un poco de buena voluntad hemos hecho lo que hemos podido.

Ayudemos todos a esta nueva comisión que ya con un poco más de experiencia, nos brinda unas divertidas fiestas a todos nuestros vecinos y forasteros, para que no se haga realidad eso que DICEN.



Dentro del libro publicado ese año por la comisión, se refleja en él un estudio muy curioso donde se pregunta un grupo de jóvenes del recién estrenado "Centro Juvenil", cuanto sabemos de nuestro pueblo.

En un trabajo realizado por las siguientes personas que a continuación nombro, nos hacen un estudio de varias cosas que existían en Huertas en el año 1973.



Maribel Corrales, Petri, Rafa, Candela, Demetrio, Carmen, Momi, Atilano, Mari Mateos, Santi, Petrita, Mercedes, Juanito, Chon, Pepi, Manolo, Luisa, Fausti, Antonio y Maria Luisa, Anita, Antonio Donaire, Agustina, Pepe Blanco y Tomás. (Siento no poder poner los apellidos de todos pues en el libro viene así la publicación, vosotros sabréis quienes sois.)

En este estudio Nos decían que en Huertas de Ánimas había ese año 2,040 habitantes. También reflejaron en el que en Huertas existían 15 tractores. 108 coches; 249 televisiones, 214 frigoríficos, ( Curioso este dato, había gente que tenía televisor y no tenía frigorífico.)

122 lavadoras. Sin embargo el numero de teléfonos no viene en el estudio y lo reflejan con números suspensivos.

412 familias disponían de agua corriente, 493 disponían de casa propia y existían 433 con "tarjea"...

No podía dejar de reflejar en este articulo, una poesía que el gran Alonso Simón escribió en este libro:

Como yo no soy poeta

porque nunca lo estudié

lanzo mis versos al aire

como Dios me da a entender.

Y les pido me disculpen

lo haga bien o lo haga mal,

quiero ocupar un espacio

en este humilde ejemplar.

Ya que dan ocasión

de poder colaborar

en las fiestas patronales

que celebra este Arrabal,

en honor de su Patrona

con toda solemnidad.

La comisión se encarga

de la fiesta popular,

y de los demás festejos

se encarga la autoridad

que cada cual en su puesto

ha de saber superar.

Y es de esperar que entre todos,

llenos de fé y voluntad,

pongamos a nuestras fiestas en un pedestal.

Ante la Virgen Bendita

digamos un año más

"Viva el pueblo de las Huertas

que es un jardín sin igual"

Aquel que pueda dudar

la belleza de sus calles

que venga y lo comprobará.

Sus mujeres en porfía,

se discutan sin hablar

a ver la calle mas bella

que resulta al comprobar,

Pues la que tenga mas puntos

mayor premio ganará.

La mía es la del Almendro

y creo que no ha de ganar

porque no sube el agua

a la hora de regar.

Les pido perdón señores

si no digo la verdad.

_ALONSO SIMÓN_









Capítulo 1.021: Finde de las tres "S"

  Santoña, Santander, Santillana del Mar. Nos volvimos a poner en carretera cuatro meses después de haber hecho el anterior viaje a Portugal...